EL PODER DE LAS PALABRAS

Siempre  en un lugar por donde pasaban muchas personas, un mendigo  se sentaba en la acera y al lado colocaba una placa que decía: 

Miren cómo soy feliz!! Soy un hombre próspero, sé que soy bonito, soy muy importante, tengo uma bella residencia, vivo confortablemente, sou un éxito, soy saludable y bien humorado.

Algunas personas que pasaban por ahi lo miraban intrigados, otros lo consideraban un loco y otros hasta le daban dinero.

Todos los dias, antes de dormir, él contaba el dinero y notaba que cada día  la cuantia era mayor.

Una bella mañana, un importante ejecutivo, que  lo observaba hace algún tiempo, se aproximó y le dijo:  Ud. es muy creativo!...

No  le gustaría coloaborar en una campaña de la empresa?
- Vamos, no tengo nada a perder.... dijo el mendigo

Después de un buen baño y con ropas nuevas, fue llevado a la empresa...

De ahí en adelante su vida fue una secuencia de éxitos y a cierto tiempo él se convirtió en uno d elos sócios mayoritarios.

En una entrevista colectiva con la prensa, él aclaró cómo conseguiría salir de la mendicidad para tan alta posición...

Entonces él les contó: Bien, hubo una época en que yo acostumbraba sentarme en las aceras con una placa al lado que decía:

Yo soy nada en este mundo!!!

Nadie me ayuda!

No tengo donde vivir!

Soy un hombre fracasado y maltratado por la vida

No consigo un mísero empleo que me rinda algunas monedas!

Mal consigo sobrevivir!

Las cosas iban de mal en peor cuando una cierta noche, encontré un libro y leyendo decía:

Todo los que hablas a tu respecto se va reforzando...

Por lo díficil que se atu vida, diga que todo va BIEN!

Por más que no te guste tu apariencia, Di bien alto al mirarte: SOY BONIT(A)!

Por más pobre que seas, si a ti mismo y a los otros que: ERES PRÖSPERO!

Aquellas líneas que leí en el libro me llegaron profundamente, y como no tenía nada a perder, decidí cambiar los dichos de mi placa... Y a partir de ese día mi vida empezó a cambiar, la vida me trajo a la persona que yo necesitaba, hasta llegué donde estoy hoy....

Solamente tuve que aprender el PODER DE LAS PALABRAS!!!

Autor Anónimo...

Un reportero irónicamente lo cuestionó: Ud, está queriendo decir que algunas palabras escritas en una simple placa modificaron su vida?

El hombre le respondió con buen humor: Claro que no,mi ingenua amiga, primero tuve que creer en ellas!

Todo lo que dices, escribes o piensas a tu respecto, es recibido por el Universo como una oración.